Más resultados...
Mi biografía comienza con este libro; decir que nací en San Fernando, el 1º de noviembre de 1922, no tiene importancia. La vida es un privilegio, hermoso, sí, pero demasiado generalizado. Más vale para mí esta vida del teatro, a la que ahora advengo después de estudiar, trabajar y esperar, como lo hacemos todos, cada uno por lo suyo.
No poseo antecedentes literarios, a no ser las muchas páginas escritas a manera de ensayo y felizmente condenadas a la discreción de mi escritorio. De ese escrúpulo, se han salvado algunas traducciones de Prévert, La Fontaine y Leopardi; “La edad del hambre”, breve poema dramático editado hace justamente un año, y esta obra que hoy, por iniciativa del Teatro Estudio, llega a la escena y a la impresión.
De la acogida que ella merezca depende la continuación de mi carrera. Aunque sea grande el amor al arte, y substancial la vocación, estimo que, en razón a ese mismo amor, deben anteponerse al entusiasmo la claridad de juicio, el reconocimiento de las propias condiciones y, en último término, el silencio de nuestra voz.